Fue como un beso de amor, la mordedura en el cuello me quemaba, la condena comenzaba, por los siglos de los siglos. Ya no descanso de noche, vuelvo a casa de mañana, y mis amigos me preguntan...pero niña¿qué te pasa?. Nadie lo supo jamás, pero inyectaste el veneno del que ama y me hiciste tu esclava. Ahora va vagando mi alma, de la noche a la mañana. Todos los besos que doy llevan tu nombre y tu marca.
Malherida, enamorada... vuelvo a casa de mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario